El destino de peregrinación favorito de España prevé imponer una tasa turística
Esto es parte del enfoque de ‘turismo consciente’ prometido por el nuevo alcalde de Santiago de Compostela.
Hace exactamente un mes, Goretti fue juramentado como el Santiago de Compostela de Sanmartin. Primera mujer alcaldesa. El escritor y político del regionalista Bloque Nacionalista Gallego se postuló en una tribuna prometiendo hacer algo al respecto. Su ciudad está repleta de turismo generalizado. Ahora ha anunciado que está intentando introducir un impuesto al turismo.
Santiago de Compostela es uno de los destinos de peregrinación más famosos del mundo católico por ser la última parada del Camino de Santiago (Camino de Santiago).camino de santiago), una red de miles de rutas por Francia y España, el objetivo de la peregrinación, en la que se camina mucho a pie y en bicicleta, es llegar a Santiago de Compostela (y a su magnífica iglesia) y obtener un certificado del Camino que acredite que al menos 100 Se han caminado kilómetros para calificar.
Es que, con la explosión del turismo de masas, hoy en día el camino se hace más con fines de ocio y salud que con fines meramente religiosos y espirituales. Como resultado, Santiago de Compostela está experimentando lo que se conoce como el efecto overtourism.
«Quiero que este municipio deje de ser solo un destino turístico y un parque temáticoDijo el nuevo alcalde, según Europa Press. En su opinión, los daños del turismo han comenzado a superar los beneficios, y cada vez más locales tienen dificultades para encontrar viviendas asequibles y decentes en el área central.
¿Algún detalle fiscal?
Sanmartín explicó que el impuesto era necesario para «algunos gastos» de los turistas e indicó que quería «un desarrollo planificado y controlado con una concesión basada en la autenticidad y la tradición».
Sin embargo, los detalles de la tarifa propuesta no se han finalizado.
Según Euronews, la idea del impuesto en la ciudad gallega se originó con el anterior alcalde Xose Sánchez Bugallo. Ahora planea construirlo de manera simple e implementarlo.
Un impuesto regional podría introducirse en 2025. Lo cobran los hoteles como tarifa por noche y cuesta entre 0,50 y 2,50 euros según el tipo de alojamiento.
Como otras ciudades populares del país ibérico ya tienen impuestos turísticos, no sería nada en el contexto español. Barcelona, por ejemplo, ha estado cobrando esa tarifa desde 2012, y desde entonces ha ido en aumento: se espera que alcance los 3,25 euros por noche el próximo año.
«Lector profesional. Jugador galardonado. Aficionado a los zombis. Adicto a las redes sociales. Experto en tocino. Erudito en Internet»