Un equipo de científicos dirigido por investigadores de la Universidad de Leicester descubrió que los genes necesarios para el aprendizaje, la memoria, la agresión y otros comportamientos complejos surgieron hace unos 650 millones de años.
Los hallazgos, liderados por el Dr. Roberto Viuda, del grupo de Neurogenética del Departamento de Genética y Biología del Genoma y otros colegas de la Universidad de Leicester y la Universidad de Friburgo (Suiza), se publican en Nature Communications.
El Dr. Fyoda dijo: “Sabemos desde hace mucho tiempo que las monoaminas como la serotonina, la dopamina y la adrenalina actúan como neuromoduladores en el sistema nervioso, desempeñando un papel en el comportamiento y funciones complejas como el aprendizaje y la memoria, así como en procesos como el sueño y la alimentación.
Sin embargo, la fuente de los genes requeridos para la producción, detección y degradación de estas monoaminas era menos segura.Utilizando métodos computacionales, reconstruimos la historia evolutiva de estos genes y mostramos que la mayoría de los genes involucrados en la producción, modificación y degradación de monoaminas la recepción surgió en el grupo de tallo diploide.
«Este descubrimiento tiene profundas implicaciones para el origen evolutivo de comportamientos complejos como los modificados por monoaminas que observamos en humanos y otros animales».
Los autores sugieren que esta nueva forma de modular los circuitos neuronales puede haber desempeñado un papel en la Explosión Cámbrica, más conocida como Big Bang, que condujo a la mayor diversidad de vida para la mayoría de los grupos de primates vivos en la actualidad al proporcionar plasticidad a los circuitos neuronales para facilitar interacción con el entorno.
«Este descubrimiento abrirá nuevas e importantes áreas de investigación que dilucidarán el origen de comportamientos complejos y si las propias neuronas modulan la recompensa, la adicción, la agresividad, la alimentación y el sueño», añadió el Dr. Fyoda.