Maersk ha firmado un protocolo marco con el gobierno español sobre oportunidades para la producción a gran escala de combustibles verdes, dado el potencial de energía verde del país y la proximidad a sus principales rutas comerciales.
Si se implementan por completo, los proyectos del protocolo podrían proporcionar hasta dos millones de toneladas de combustible verde por año, según Maersk. Maersk necesita alrededor de seis millones de toneladas de metanol verde por año para cumplir con su objetivo de emisiones de la flota para 2030, y se ha comprometido a alcanzar el cero neto para 2040.
“Vivimos una emergencia climática y necesitamos acelerar la disponibilidad de futuros combustibles verdes. Estamos muy contentos de explorar oportunidades de combustibles verdes con el gobierno español, ya que el país tiene las características clave para ayudar a resolver este desafío”, dijo. . El director ejecutivo de Maersk, Soren Skou.
Maersk está considerando oportunidades de energía verde en Andalucía y Galicia, donde hay mucha luz solar y viento (respectivamente). El acuerdo cubre toda la cadena de valor, desde las fuentes de energía renovable hasta el abastecimiento de combustible. Se estima que tiene potencial para crear 85.000 puestos de trabajo, entre construcción y empleos temporales.
Según El Progreso, el proyecto tiene un valor de inversión de hasta $10 mil millones en los próximos ocho años. Se rumorea que tiene su centro en el puerto de A Coruña, y puede estar implicado construcción o adquisición Cuatro gigavatios de capacidad de generación de energía para una cadena de suministro de electricidad y combustible integrada verticalmente.
“Este proyecto está totalmente alineado con la hoja de ruta de España para la reindustrialización, la transición lean y el hidrógeno verde, que avanza en el compromiso común de la UE con la descarbonización. Reforzará los lazos económicos, políticos y comerciales con Dinamarca, socio y amigo en la UE”, dijo el presidente del Gobierno español. dijo el ministro Pedro Sánchez.
El protocolo es uno de varios acuerdos que Maersk ha organizado para abordar el mayor problema de la transición ecológica en el transporte marítimo: el suministro de combustible. La compañía necesita alrededor de 750.000 toneladas por año durante un período de tres años para operar los 19 buques propulsados por metanol pedidos. Como actualmente falta este suministro, Maersk ha firmado siete acuerdos de empresa conjunta diferentes con futuros proveedores para ayudar a construir el sector energético que necesita.